Demi Lovato, su renovada imagen y una caída épica en la piscina

Demi Lovato está de enhorabuena. Y lo está por tres motivos. A saber: acaba de presentar su nuevo single Cool for the summer; presume de imagen y cuerpazo allá por donde pasa y, sobre todo... ¡está entera! Y es que, tras ver el morrazo que se ha dado recientemente, es raro que no se haya roto nada.
Vamos por partes. Lo primero es lo primero, y en este caso se llama Cool for the summer, el que apunta a nuevo himno veraniego de las fiestas made in USA. Se trata del primer single del quinto trabajo de Demi, y uno de los más optimistas y divertidos. Y es que la versión 5.0 de Demi Lovato mola mucho, como ya enseñamos hace tiempo.
Y mola porque tiene las cosas muy claras. A sus 22 años, sabe lo que quiere, cómo lo quiere y cuándo lo quiere. Y entre dichas preferencias está quererse ella misma y su cuerpo. De hecho, la cantante se ha convertido en el ideal del Normcore, el nuevo cuerpo de moda en todo el mundo. Es decir, mostrarte tal y como estás. Y eso hace Demi Lovato. Que si está pasada de peso, que si no lo está, a ella le da igual.
Luce tipazo, presume de curvas y enamora con su sonrisa. Incluso sin maquillaje. De hecho, Demi ha cambiado un look más rockero y agresivo, por uno más sexy y provocativo para su nuevo trabajo. Y bien orgullosa que está de ello. Enseño más piel porque he trabajado duro para tener este cuerpo. Lo siento pero no lo siento. Olé ahí.
La caída del verano
Pero claro, ahora viene cuando la matan. O cuando (casi) se mata. Si trabajas duro para tener el cuerpo que quieres y luego lo destrozas contra el suelo, mal asunto. Resulta que la cantante organizó un fiestón en una piscina para presentar su single en sociedad. Una fiesta que tenía de todo: agua, bikinis, bañadores, cuerpazos, espuma, buen rollo y, como no, Demi Lovato con un micro. Diversión asegurada.
Pero claro, a todo ese combo, hay que añadir los taconazos de la cantante que, sumados a la espuma, le jugaron una mala pasada. Y es que en un momento de la actuación, Demi se dio el morrazo del verano. Señora caída que, a buen seguro, al día siguiente dejó secuelas en forma de moratón.
Pero olvidamos que esta Demi Lovato está hecha de otra pasta. La ex chica Disney se levantó, levantó los dedos en señal de victoria (por estar viva, suponemos) y siguió cantando. Grande Demi. Que no pare la fiesta.
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